Bebemos
sorbo a sorbo
nuestros cuerpos
descalzos sobre la arena.
descalzos sobre la arena.
Brindando
el licor de nuestros labios
al ritmo del soneto de las olas.
Emborrachando
de amor
nuestros poros.
Fundiéndonos
en la libertad
de nuestros cuerpos desnudos
abrigados por los rayos del sol.