Me miro al espejo,
me hundo en su reflejo,
me hundo en su reflejo,
en la noche oscura y callada,
y allí en él te encuentro,
desnudándome con tus pupilas.
desnudándome con tus pupilas.
Me miro al espejo,
toco tus labios,
mi boca se funde en ellos,
mi boca se funde en ellos,
tu lengua queda atrapada en su cauce,
tus dedos reptan por mi piel.
Me miro al espejo,
me abandono, lentamente,
a la sombra de tu cuerpo,
y a la voluntad del placer,
hasta ser luz en nuestro amanecer.